jueves, 9 de junio de 2016

Amorfológico

Llena de palabras en la oscuridad, ninguna parece aportar sentido a mis sentidos.

Es extraño sentirme una extraña en mi propio cuerpo. Nada de lo que diga, haga, piense o sienta parece importante.

Como si sólo algo transformador fuese valioso.

Sé que probablemente mi estar es ambiguo, abstracto, ambivalente, acariciante, acuciante y altisonante.

Sé que así como estoy puedo no interesarle a nadie. Tal vez, hasta puedo ser incomprensible, inasible e inabarcable.

Pero estoy siendo esta que estoy siendo.

Uno de mis mayores desafíos en este exacto momento es dejarme ser así. Después de todo, resguardarme es parte de la acostumbrada manera de adaptarme y, aunque la adaptación me ha salvado (y aún salva) la vida, a veces tampoco tengo claro para qué salvarla. Ni de qué.

Dejarme fluir implica en mí una tarea ciclópea permanente. Claro que nada de lo permanente permanece...

Paradójicamente harta de diatribas, me entregaré al anonimato del sinsentido y a la no-comprensión de aquellos que no sepan encontrar lo que aquí estoy mostrando; no por elitismo sino porque hoy, simplemente, no encuentro otra manera de mostrarme.

Cyndi Viscellino Huergo ®Todos los derechos reservados